Existen muchos tipos de intervenciones quirúrgicas, cada una de ellas necesita de una preparación concreta motivada además por las características propias del paciente, sin embargo existen algunas bases comunes acerca de cómo prepararse ante una cirugía, repasamos algunas de las más importantes, que ayudarán a que la operación no revista ninguna complicación.

Cómo prepararse ante una cirugía general

  • Existen ciertas características de los pacientes que influyen en cuestiones como la anestesia. Si fumas es mejor que dejes de hacerlo antes de la operación, ya que la anestesia puede afectar a los pulmones. El uso de medicamentos debe ser notificado al equipo médico, así como la diabetes y otras dolencias.
  • El consentimiento informado es obligatorio ante cualquier cirugía, se trata de un documento en el que el paciente consiente en llevar a cabo el proceso, evaluando y aceptando los riesgos que pudiera entrañar.
  • En muchas operaciones se puede realizar algún tipo de examen físico y análisis, así como electrocardiogramas y otras pruebas. La cirugía supone un proceso que puede suponer un gran estrés al organismo, evaluarlo es fundamental en la mayoría de los casos.
  • El día antes de la cirugía puede requerirse el uso de un laxante, además de llevar a cabo una dieta especialmente blanda. El alcohol está absolutamente prohibido 24 horas antes de la operación, incluso podría imponerse un período de ayunas de unas 24 horas antes de la operación.
  • El mismo día de la operación se requiere que el paciente llegue mucho antes de la operación a fin de prepararse para la intervención. Asegúrate de llevar la tarjeta sanitaria, eliminar el esmalte de uñas, no maquillarse y retirar objetos de joyería. Cuando le entreguen el brazalete con sus datos no olvide comprobarlos.
  • La preparación preoperatoria incluye determinadas especificaciones según el tipo de cirugía aplicada, las recomendaciones más comunes incluyen la eliminación de dentaduras, lentes, horquillas, joyas y otros elementos similares; la utilización de una bata de hospital y gorro; información antes de la anestesia, colocación del suero y administración de medicamentos específicos. No olvides informar al médico de alergias e intolerancias respecto a medicamentos y materiales que se pudieran encontrar en quirófano.
  • Una vez finalizada la operación, el paciente vuelve a una zona de recuperación en la que deberá permanecer hasta que se restablezca.

Estos son algunos consejos acerca de cómo prepararse ante una cirugía general, como decimos, existen diversas modificaciones específicas para cada operación y paciente, sin embargo las anteriores normas generales deberán seguirse en todos los casos.

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