La fiebre amarilla ha causado muchas epidemias mortales a lo largo de la Historia. Sin embargo, hasta el año 1900 no se identificó al mosquito como el transmisor de la enfermedad. Fue el primer paso importante en la lucha contra la fiebre amarilla. En este post te explicamos qué es la fiebre amarilla y cómo se transmite en humanos.
Qué es la fiebre amarilla
La fiebre amarilla (YF) es una enfermedad causada por un virus de la familia Flaviviridae. Aparece principalmente en África y en América, y causa un amplio número de síntomas que van desde leves a mortales. Los más reconocibles son la fiebre y la ictericia, que le da a la piel y ojos del enfermo un tono amarillento.
Cuando el virus entra en el cuerpo se produce un período de incubación de tres a seis días. Hay entonces dos fases de la enfermedad. Aunque algunas infecciones no presentan síntomas, la primera fase «aguda» se caracteriza normalmente por fiebre, dolor muscular (con dolor de espalda prominente), dolor de cabeza, escalofríos, pérdida de apetito, náuseas y / o vómitos. A menudo, la fiebre alta se asocia paradójicamente con un pulso lento. Después de tres a cuatro días la mayoría de los pacientes mejoran y sus síntomas desaparecen.
Sin embargo, el 15% entran en la llamada «fase tóxica» en 24 horas. La fiebre reaparece y varios sistemas del cuerpo se ven afectados. El paciente desarrolla ictericia y dolor abdominal con vómitos. Puede haber sangrado por boca, nariz, ojos y / o estómago, y la sangre aparece en el vómito y las heces. La función renal empeora, lo que puede conducir a la insuficiencia renal completa sin producción de orina (anuria). La mitad de los pacientes en la «fase tóxica» mueren dentro de 10-14 días. El resto se recupera sin daño significativo de órganos.
Cómo se transmite la fiebre amarilla
La fiebre se transmite por culpa del mosquito Aedes aegypti, portador también del dengue. El virus puede infectar a monos y humanos, y existen dos formas de transmisión:
Transmisión silvestre (la más rara): la enfermedad se transmite a un humano después de ser picado por un mosquito que se había alimentado previamente de sangre de un mono infectado. Ocurre solo en personas que viven o trabajan en bosques tropicales húmedos.
Transmisión urbana (la más común): la enfermedad se transmite de persona a persona por la picadura del mosquito (el mosquito pica a un enfermo y luego a un sano, inoculando el virus).
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