Una bajada de tensión puntual no tiene por qué suponer un riesgo serio para salud de una persona. Si te encuentras en situación de hipotensión, o te ves con alguien que pueda sufrirla, hay algunas pautas que puedes seguir para controlar el momento. Toma nota de qué hacer ante una bajada de tensión arterial puntual.

Cómo actuar ante un caso de hipotensión

Las bajadas de tensión afectan principalmente a personas muy delgadas, mujeres embarazadas y personas mayores. Sin embargo, hay causas concretas que pueden favorecer la aparición de episodios de hipotensión en cualquier persona, como estar sometido a mucho estrés, ambientes muy calurosos o cambios bruscos de posición.

Una bajada de tensión produce que la sangre llegue en menor cantidad y con menos fuerza al cerebro, por lo tanto, menos oxígeno. Esta situación puede provocar algunos síntomas como mareos, visión borrosa, fatiga, zumbido en los oídos o sensación de frío en manos y pies. No se trata de síntomas preocupantes si se dan de forma puntual, incluso si se llega al punto de desmayarse. No obstante, puedes seguir algunos consejos para que las molestias sean mínimas.

Si se empieza a sentir mareo, lo mejor es sentarse con la cabeza inclinada hacia abajo, o, mejor aún, tumbarse con las piernas levantadas. Esto favorece la circulación hacia el cerebro, por lo que los síntomas deberían desaparecer en poco tiempo. También ayuda a paliar los síntomas de una bajada de tensión tomar un líquido azucarado o con cafeína, además de tomar algún alimento rico en azúcar, como, por ejemplo, gominolas.

En caso de que ocurra de forma frecuente, lo más recomendable es acudir al médico para encontrar la causa, especialmente si va asociada a la aparición de otros síntomas. No obstante, hay algunas recomendaciones a tener en cuenta para personas propensas a las bajadas de tensión. Entre otras cosas, se recomienda realizar ejercicio de forma habitual, evitar el sobrepeso, practicar técnicas de relajación, tomar mucho líquido, seguir una dieta equilibrada y evitar la exposición a ambientes demasiado calurosos.

Ya sabes qué hacer ante una bajada de tensión arterial puntual. Como ves, es algo que en principio no reviste una mayor importancia, pero que deberías consultar con un especialista de la salud si se produce de forma demasiado habitual o si aparecen otros síntomas más relevantes. ¿Alguna vez has sentido una bajada de tensión? Cuéntanos tu experiencia.

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